Fuente: Confidencial
Leopoldo López:“la juramentación de Edmundo González Urrutia el 5 de enero de 2025 va a tener un impacto en Nicaragua, en Cuba, y en Bolivia”
A Nicolás Maduro “no hay que obligarlo a que entregue las actas, cualquier cosa que él entregue va a ser falsa y va a dilatar lo que ya sabemos que es la verdad, que Edmundo González ganó. Lo que hay que lograr es que Maduro reconozca los resultados y que podamos comenzar un proceso de transición que debe tener como fecha límite la toma de posesión de Edmundo González, el 10 de enero del 2025”, afirma Leopoldo López, fundador del partido Voluntad Popular, hoy exiliado España, después de permanecer siete años preso y confinado en Caracas, Venezuela.
En una conversación con el programa Esta Semana y CONFIDENCIAL el dirigente opositor venezolano apeló a “que sigamos movilizados, organizados, que no perdamos la esperanza, eso es lo más importante en estos momentos”, en un proceso que “sabemos no es una línea recta, y que no va a ser fácil, la dictadura se está resistiendo y se va a resistir”, y a nivel internacional, aboga por “alinear a todas las fuerzas posibles: Gobiernos, opinión pública, organismos no gubernamentales, hacia un punto de debate común entre todos, que es reconocer lo que ocurrió el pasado 28 de julio”.
“Nosotros esperamos que se reconozcan los resultados, que se juramente a Edmundo González el 5 de enero, y eso va a tener un impacto en Nicaragua, en Cuba, y en Bolivia. Estamos en una coyuntura en donde lo que pasa en Venezuela va a marcar lo que pueda ocurrir o no en los países que también están sometidos a la autocracia en el continente”, afirma López.
El Consejo Electoral declaró ganador a Maduro sin presentar una evidencia de los resultados electorales, mesa por mesa. ¿Qué impacto ha tenido en Venezuela y a nivel internacional la publicación del 82% de las actas presentadas por la oposición que demuestran el triunfo de Edmundo González y el fraude de Maduro?
Hace dos semanas se dio una elección que ganó Edmundo González de manera contundente, con el 70% de los votos. Si se hubiesen sumado los 5 millones de venezolanos que estamos en el exterior hubiese sido más del 80%.
Se publicaron las actas porque nos preparamos para tener presencia en todos los centros de votación, para tener registro de la votación y esas actas están a disposición, las puedes revisar tú, las puede revisar tu audiencia, las puede revisar cualquier organismo internacional.
Los resultados han sido verificados por el único observador que estuvo en las elecciones, que fue el Centro Carter, el día viernes el Centro Carter dio un informe, donde decía claramente que Edmundo González ganó la elección. Segundo, dijo que no hubo un ataque cibernético, como lo pretendió presentar Nicolás Maduro, y que los resultados son los que son.
¿Qué impacto ha tenido eso? el impacto lo ha tenido el hecho de que ganamos la votación, no las actas. Los votos es lo que ha tenido un impacto, la gente es lo que ha tenido un impacto. Se ganó en todos los Estados del país. Son 24 Estados, se ganó en todos los municipios del país, 335 municipios. Se ganó con la misma proporción en los lugares más pobres y los de clase media. Y esto es lo que realmente ha tenido un impacto en los venezolanos de sabernos que tenemos ya una mayoría registrada, plasmada en los votos y ha tenido un impacto en la comunidad internacional.
La autocrática no le presta atención ni a los votos, ni a las actas, ni a las pruebas, ni a la elección. Lo único que les interesa es que Maduro se mantenga en el poder. Por esto China, Rusia, Irán, Cuba, Bielorrusia, Corea del Norte, Eritrea, Nicaragua, Bolivia, han reconocido al fraude, pero los países democráticos de la región, de izquierda o de derecha, y los países democráticos del mundo han cuestionado los resultados presentados por Maduro y muchos de ellos ya han reconocido los resultados que dan a Edmundo González como ganador de esta elección. Esos países son Argentina, Uruguay, Costa Rica, Panamá, Perú y los Estados Unidos.
Maduro está atrincherado en no presentar los votos, ha recurrido al Tribunal Superior de Justicia. ¿Se le puede presionar u obligar a entregar las actas con la protesta nacional y la presión internacional?
A lo que hay que obligar a Maduro no es a que entregue las actas, porque cualquier cosa que él entregue va a ser falsa y simplemente lo que va hacer es dilatar lo que ya sabemos que es la verdad. La verdad es que Edmundo González ganó. Lo que hay que lograr es que Nicolás Maduro reconozca los resultados y que podamos comenzar un proceso de transición que debe tener como fecha límite la toma de posesión de Edmundo González, el 10 de enero del año 2025.
Sabemos que eso no es fácil. La dictadura está atrincherada, Maduro está recurriendo a lo que tiene, que es la fuerza, el alto mando militar y policial, la persecución, la cárcel, la tortura y la muerte, eso es lo que cuenta Maduro.
Maduro no tiene gente. El chavismo se erradicó del país, para sorpresa de algunos que veían Venezuela todavía como un país dividido, Venezuela no está dividida. El 80% de los venezolanos quiere salir de Maduro y me atrevo a decir que este 30% que votó a Maduro, si realmente pudiesen haber votado de manera libre, estaríamos hablando de que Maduro cuenta con menos del 10% del apoyo popular.
La iniciativa diplomática
La iniciativa diplomática de Brasil, México y Colombia le ha demandado a Maduro presentar las actas ante el Consejo Electoral y someterlas a una verificación independiente y también ofrecen ser una especie de mediadores para buscar una salida negociada. Ya lo han planteado dos veces, pero el Gobierno no cede ¿cuánto tiempo más pueden o deben esperar y qué espera la oposición de esta iniciativa?
Es una iniciativa que por supuesto te respalda para poder avanzar en el proceso de negociación que corresponde, no sobre los resultados de la elección, eso está claro como el agua, sino sobre cómo se va a dar la transición. Esta sería la negociación. Esto lo ha reiterado Edmundo González, María Corina Machado. Si en estos términos Brasil, México, Colombia pueden ayudar, por supuesto que es más que bienvenida esta posición.
Hay que tener mucho cuidado que estos anuncios de negociaciones de las que no se sabe nada, realmente lo que hay son rumores, sea una herramienta para dilatar el reconocimiento de países sobre lo que ocurrió en Venezuela.
Mencionaste a los Gobiernos que ya han reconocido a Edmundo como presidente electo y que no reconocen la victoria de Maduro. ¿Qué viene después de esto, qué espera la oposición? ¿Se podría repetir el fenómeno de Juan Guaidó como presidente interino y el dictador continuando en el poder, controlando todos los resortes del poder?
El escenario es otro. El escenario del año 2019 fue el hecho de que Maduro cerró la elección del año 2018. No participamos en esta elección y —según la Constitución— le correspondía al presidente de la Asamblea asumir la Presidencia encargada para promover dónde estamos hoy, que es una elección. Hubo una elección y ya la condición de Edmundo González no es de presidente interino ni ninguna otra alternativa a lo que establece la Constitución, es presidente electo en estos momento y presidente juramentado a partir del 10 de enero del año 2025. Esta es la ruta.
Sabemos que no es una línea recta, y que no va a ser fácil, sabemos que la dictadura se está resistiendo y se va a resistir. Maduro cuenta con aliados poderosos. El miedo también juega y la desmovilización también está presente. Conocemos todos los obstáculos que están en este camino, pero es el camino a recorrer.
Las protestas que estallaron en Venezuela hace dos semanas y las movilizaciones en defensa del voto y el triunfo de Edmundo González, ¿En qué se asemejan o se diferencian al movimiento La Salida en que vos participaste en 2017 y por el que fuiste arrestado y te llevaron a la cárcel?
En el año 2014 fue el movimiento de La Salida, María Corina Machado, Juan Guaidó, algunos otros dirigentes, Antonio Ledezma, y yo, convocamos a la calle luego de que Maduro se robó su primera elección del año 2013. Convocamos con la intención de activar la Constitución y salieron decenas de miles de personas y eso nos llevó a muchos de nosotros a la cárcel. Yo pasé los próximos siete años en confinamiento y vi ese momento como un momento de quiebre. Hasta ese momento todavía se pensaba que Venezuela era una democracia con problemas, pero una democracia, así se percibía desde afuera, así se percibía incluso desde la opinión de los venezolanos.
A partir de este año hay un quiebre y la represión de Maduro solo ha incrementado en todo sentido, la represión militar, policial, el control social, la limitación en las comunicaciones. Han sido diez años en donde hemos visto 15.000 detenciones arbitrarias, cientos de radios, televisoras, medios cerrados en Venezuela, persecución de toda la disidencia, no solamente por una acción política sino personas que ponen mensajes en las redes sociales y ya.
Desde hace dos semanas exactamente, hemos entrado en otra etapa. A partir del domingo de la semana pasada lo que vimos fue un aumento gigantesco, exponencial, en los niveles de represión, de persecución, de censura y de locura también, por parte del dictador Nicolás Maduro.
Mucho se habló de la similitud del escenario que podíamos tener con Nicaragua y yo creo que Nicolás Maduro está viendo como uno de sus referentes lo ocurrido en Nicaragua, con Daniel Ortega, la manera como arrebató la elección y cómo ha impuesto unos niveles de represión que ha llegado a todos los sectores, incluyendo la Iglesia Católica, como ya está pasando en Venezuela también.
En las últimas dos semanas el Foro Penal registra 24 muertos y 1200 detenidos y también hay amenazas de captura y criminalización contra el presidente electo Edmundo González, María Corina Machado y otros líderes opositores, de parte de Nicolás Maduro. ¿Está en riesgo su libertad, su capacidad de seguir ejerciendo ese liderazgo político?
Por supuesto, todo eso está en riesgo, y Maduro lo ha dicho y lo han dicho Diosdado Cabello y Jorge Rodríguez, lo ha hecho el fiscal. Por supuesto que están en riesgo. Ahora yo te puedo decir que conozco a María Corina, la conozco muy bien. Convocamos a La Salida juntos en el año 2014. A mí me llevó a la cárcel, a ella la llevó a una prohibición de salida del país y conozco su valentía, su determinación y sabe sortear los obstáculos que estamos enfrentando en estos momentos.
La salida a la crisis de Venezuela
¿Cómo valoras la posición de la Fuerza Armada Bolivariana? Hemos visto al General Padrino que está alineado con Nicolás Maduro en una posición claramente golpista de las Fuerzas Armadas respaldando el fraude. ¿Esta es una posición monolítica de la cúpula de las Fuerzas Armadas? ¿Puede ser afectada por las protestas o por la presión externa?
Lo que hemos visto es que la cúpula militar, los altos mandos militares, sí han tomado la decisión de acompañar el fraude y como tú bien lo dices, de ejecutar un golpe de Estado, porque lo que ha ocurrido es la ejecución de un golpe de Estado que ha arrebatado los resultados y ha querido imponer por la fuerza bruta y la fuerza institucional controlada por Maduro, que es lo que ocurrió el domingo.
Cuando hablamos de las Fuerzas Armadas, sin duda hay una realidad en la élite, pero es una realidad distinta a la inmensa mayoría de los otros miembros de la Fuerza Armada. Yo no soy militar, pero viví en una unidad militar durante cuatro años de los siete que estuve preso, y te puedo decir que los militares venezolanos son venezolanos, eso es muy obvio, pero es muy importante recordarlo, sus hijos, sus padres, sus problemas, sus anhelos, sus frustraciones son venezolanos y eso hace que la base de la estructura militar y la estructura policial esté incómoda con esto. Y esto lo vimos la semana pasada en las protestas que hubo cuando policías se quitaron el uniforme y se sumaron a la protesta, cuando militares tomaron la decisión de no reprimir y se sumaron a las protestas.
Yo creo que es un sentimiento que está allí. Evidentemente, no es masivo en estos momentos, lo que estamos viendo es una represión con todo el despliegue de la fuerza de Maduro, y ese despliegue incluye a grupos paramilitares, grupos que ha venido armando la dictadura durante todos estos años y con total arbitrariedad se han llevado a 1200 personas, pero el propio Maduro dice que son más de 2600. La cifra puede estar por los 3000 y 4000. Hablan de 26 muertos, pero hay otras fuentes que hablan de 70, 80, 100 muertos y no hay información porque la dictadura se ha encargado de ir asfixiando la información independiente.
En Venezuela, el día viernes, Maduro anunció el cierre de plataformas de comunicación como Signal, plataformas de comunicación masiva como es el caso de la plataforma Twitter, el X fue ya prohibido en Venezuela y es muy probable que Maduro quiera seguir en este proceso de aislar ya por completo las comunicaciones que ya eran precarias. Pero ¿qué es lo que pretende hacer ahora? Es un cierre total de la comunicación hacia Venezuela y dentro de Venezuela.
¿Cuál es la salida que plantea la oposición ante esta crisis? Has dicho: Edmundo González, el presidente electo, debe ser juramentado el 10 de enero. ¿Cómo se llega a ese momento? Se habla de las protestas de calle y también de una salida negociada. ¿Qué está dispuesto a negociar la oposición con el régimen si logran sentar a Maduro en una mesa de negociación?
La condición principal es que a lo interno sigamos vivos, que sigamos en la lucha, que sigamos movilizados, organizados, que no perdamos la esperanza. Eso es lo más importante en estos momentos y a nivel internacional, poder alinear a toda la fuerza posible: Gobiernos, opinión pública, organismos no gubernamentales, hacia un punto de debate común entre todos, que es reconocer lo que ocurrió el pasado 28 de julio.
Esto es obvio, pero algunas voces de afuera vienen con estrategias que nada tienen que ver con esto o plantean una revisión de los resultados. Plantean un gobierno de unidad, repetición de elecciones. Y yo creo que ninguna de estas alternativas debe estar sobre la mesa cuando ya los venezolanos se expresaron de manera contundente,
Si esta propuesta de negociación no se logra dar o si fracasa. Decías, Maduro está inclinado a replicar la solución de fuerza de Ortega que se impuso en Nicaragua. ¿Qué impacto tendría esto en la sociedad venezolana y en el continente americano?
Estamos en una coyuntura en donde lo que pasa en Venezuela va a tener un impacto dentro y para Venezuela. Por supuesto que Maduro está haciendo todo lo posible para aplacar, para convertir a Venezuela en Corea del Norte, en Cuba, en Eritrea, en Nicaragua. Eso es lo que sueña Maduro y evidentemente ante eso toca resistir y toca resistir con todas las herramientas que podamos.
Pero si lo contrario ocurre, que es lo que nosotros esperamos, que se reconozca los resultados, que se juramente a Edmundo González Urrutia el 5 de enero, eso va a tener un impacto en Nicaragua, en Cuba, en Bolivia. Es decir, estamos en una coyuntura en donde lo que pasa en Venezuela de alguna manera va a marcar lo que pueda ocurrir o no en los países que también están sometidos a la autocracia en el continente.
Gracias Leopoldo.
Muchísimas gracias a ti, Carlos, y a toda tu audiencia. Y gracias por el trabajo que haces. Y si me permites, a tu audiencia en Nicaragua, los que están dentro y fuera de Nicaragua, les decimos hermanas y hermanos, esta es la misma lucha, la de ustedes es la lucha Venezuela, la lucha de Venezuela es la lucha de Nicaragua, porque estamos unidos con un mismo sueño, el sueño de ser libres, de tener un país que funcione, que tengamos las elecciones libres, Estado de derecho y oportunidades para todos nuestros ciudadanos. Así que muchas gracias y seguimos en esta lucha juntos.