El petróleo se convertirá en aliado del progreso de los pescadores en Maracaibo, en lugar de ser un problema para ellos, quienes contradictoriamente viven sobre nuestra mayor riqueza, pero inmersos en la pobreza. En nuestra visita a la zona de Santa Rosa de Agua, en la parroquia Coquivacoa, los pescadores nos mostraron  los daños ambientales que han afectado al Lago de Maracaibo, sus palafitos y su trabajo de la pesca. Además nos explicaron que son vÃctimas a diario de la inseguridad y de los abusos de quienes quieren especular con su trabajo diario, dándoles migajas por la pesca para luego revender sin ningún control de precios.
El coordinador de la Asociación de Pescadores de Santa Rosa de Agua, Emeri âMirringoâ DÃaz nos explicó, en nombre de toda la comunidad, que los gobiernos regional y nacional no los han tomado en cuenta. Es inaceptable ver las condiciones en las que está el Lago y los palafitos que una vez fueron el origen del nombre de nuestro paÃs âla pequeña Veneciaâ. Nosotros tenemos que construir una Venezuela distinta en donde el petróleo pueda convivir con la pesca. Nuestro petróleo será una palanca para el bienestar y el progreso, pero en armonÃa con el ambiente.
La contaminación no sólo afecta la pesca, sino también el turismo, la salud y las condiciones de vida de miles de personas que coexisten en el la costa de Maracaibo. El gobierno nacional es quien debe garantizar la armonÃa entre todos estos puntos, el compromiso con los pescadores es recuperar el lago, garantizar que sea fuente de riqueza no solo para la pesca, sino para el turismo y para el orgullo de todos los venezolanos.